Desafiando perpendicularmente a los Andes patagónicos y a 120 kilómetros al noreste de Puerto Natales se encuentra la Sierra Baguales, aferrada al territorio que hace miles de años la vio formarse.
Emergió de los suelos hasta alcanzar el cielo, para enseñarle sus cimas donde alberga los tesoros recolectados del pasado, o más bien los viajeros secuestrados de la planicie.
El bagual se demuestra indomable, estoico, salvaje y admirable, esperando paciente la visita aterrazada, escalonada, y vertical, esa que milímetro a milímetro se aleja de la tierra.
Es el paisaje de la eterna exploración, donde la mezquindad de su entendimiento perpetúa en una historia de millones de años, escrita en los suelos, sus faldas y sus cimas.
Geolectura
Estas agresivas sierras marcan la divisoria de aguas, es decir, el límite de la influencia del clima Pacífico. Hasta ésta Longitud todas las aguas precipitadas como lluvia o nieve vienen con los Westerlies o “vientos del Oeste” y hacen su camino de vuelta al Océano Pacífico.
Hacia el Este las escasas precipitaciones van a dar al Océano Atlántico. La fuerza erosiva es mayor donde hay más agua y así, esta divisoria se mueve silenciosamente, erodando las cumbres de Sierra Baguales hacia el Este, redibujando los límites de nuestros mapas.
Lo que genera la tremenda resistencia que se impone a los vientos, son las rocas basálticas que coronan estas cumbres. Negras en esencia, magnesianas, y con una textura finamente cristalina crean una cuchilla afilada hacia el Oeste, y como un manto protector de la erosión caen al Este de Sierra Baguales.
Lo que encierra y guarda el manto basáltico es el más completo registro fósil conocido en el sector para el Cenozoico; desde trazas fósiles, moluscos, crustáceos, tiburones, en la base, pasando por una colección completa de hojas, enseñándonos la diversidad de los bosques en los que convivían eucaliptus, Nothofagus, araucarias.
Tras un breve ingreso de aguas Atlánticas, las rocas de la parte superior de la secuencia son nuevamente terrestres, con abundancia de fósiles de mamíferos. Sin duda, Sierra continuará sorprendiéndonos.